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jueves, 6 de abril de 2017

OBJETOS MANUFACTURADOS Y ARTE

En el ocaso, que para los tiempos fue promesa restauradora de sus verbos direccionales, los grandes protagonistas de la historia en el trascurrir de las cronologías, superaban en medidas fehacientes sus principios humanizantes en favor del declinar de las medidas correspondientes a los actos validos, que como factores preponderantes transformaban irreversiblemente la evolución de los ámbitos e influencias, acatados luego en códices y normas sustantivas, de pertenencias inamovibles, si no fuera gracias a que su naturaleza artificial lo permitiese, dejando a margen favorable una gran consideración hipotética, que remiraría la idiosincrasia de los pueblos creadores, y de sus grupos avante, y como tal representantes, que sostenían las bases insustanciales de un primer conocimiento sustentado en la pura idea.

Por esto es que la semejanza en las proximidades, hace sus propias causas, de cualquiera de los emergentes intelectuales, pues se rigen por leyes físicas de distancia y tiempo, para dar, así como resultado la clasificación de sus ordenes de precisión y funcionalidades, que a este caso pasarían a ser méritos del operador de los actos repetitivos, en el lugar adecuado y bajo el cobijo de un universo conocido.

Esto, pues, no permitiría que la duda, por exenta que fuese, entre semejanza y concordancia, dividiese sus verdaderas realidades en favor de las hipótesis, colocando "Diagramas abstraídos" de refinamientos, para los localizados sentidos de la percepción.

Con una sola mirada, el amor entra por la mejor puerta, el sentido de la vista, o, al menos, esto lo decide el posible instigador que descifrara, las "intimidades" de las presencias percibidas, y, sus absolutos constantes; a debida cuenta que son solo eso: limites.

¿Con que linterna favorecedora, de esclarecimiento, no titubea el gusto en favor del estilo?

O mejor, si nosotros fuésemos alumbrados a la distancia justa.

Rápidamente, en el deterioro de las grandes antigüedades, se percata uno, que el reemplazar lo mejor, por lo mejor, fatiga los intelectos descimentando la obra a restaurar, que con gran certeza y en diferentes lenguajes, causas utilizadas como posibles, para conformar su propia solución. Vemos aquí, que la conformación y establecimiento de normas reguladoras que manejen desde ya los principios, nos ejecutan su inverosímil rapidez de la cuenta aprobada.

Somos solamente sujetos conmociónales en el derrotero de la naturaleza de las imágenes. RC